De pilas a piedras.

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Un problema silenciado.

A lo largo de la historia de la humanidad la naturaleza ha provisto al hombre de múltiples recursos que, muchas veces, el hombre no ha sabido canalizar y se vale. Por ejemplo, cada vez que llueve o simplemente el cielo se ilumina con truenos, la cantidad de energía liberada es impresionante, rebasan los miles de megavatios, los cuales no son nada fácil de almacenar en el sistema eólico por su poca capacidad. Esto representa un reto para la humanidad y Siemens, la empresa Alemana, lo está logrando. ¿Cómo? Nada más y nada menos que con piedras. Sí, leíste bien. Estas piedras son capaces de retener energía en forma de calor, a una temperatura aproximada de más de 600 grados centígrados.

El proyecto lo están llevando a cabo con la Universidad de Tecnología de Hamburgo y Hamburg Energie, compañía local, trabaja en el Future Energy Solutions (FES). Este sistema tiene la capacidad de almacenar energía calórica por varias horas.

El proceso resulta más sencillo de lo que parece: la planta convierte el superávit de energía en calor, que es soplado hacia un compartimento aislado con piedras en su interior. Estas rocas se calientan hasta alcanzar una temperatura superior a 600 grados centígrados. Una vez almacenado en calor, si hay un aumento de la demanda de energía las rocas calientan un flujo de aire que se conduce a un ciclo de vapor para generar electricidad nueva.